2011
07 Jul.2011 - 07 Ago.2011
Artistas
Curaduría
Libremente inspirado por los viajes en Yucatán, Chiapas y Centroamérica de John Lloyd Stephens y Frederick Catherwood en 1839 y 1841, y el viaje realizado en 1969 por Robert Smithson por la península del sureste, la exposición presenta el trabajo de artistas modernos y contemporáneos que a través del turismo, la arqueología, o la antropología, se relacionan con el paisaje de ruinas antiguas y modernas para construir una nueva arqueología del presente.
En octubre de 1839, el escritor John L. Stephens y su muy sincero amigo el dibujante Frederick Catherwood partieron de Nueva York rumbo a Centroamérica, Chiapas y Yucatán. Realizaron dos viajes en 1839 y 1841, durante los cuales registraron por primera vez casi en su totalidad la mayoría de las ruinas mayas de la región. Los libros de sus viajes
Incidentes de viaje en Centroamérica, Chiapas y Yucatán de 1841, e Incidentes de viaje en Yucatán de 1843, inmediatamente se convirtieron en best-sellers y desataron una ola de exploradores, arqueólogos y amateurs que siguieron sus huellas.
En 1969 el artista estadounidense Robert Smithson viajó por Yucatán. Durante su expedición, Smithson realizó la obra Incidentes de Viaje-Espejo en Yucatán (el título con clara referencia al libro de Stephens y Catherwood), para la cual instaló y fotografió 12 espejos en nueve lugares distintos de la península. Posteriormente, Smithson visitó Palenque, Chiapas, donde se hospedó en el Hotel Palenque. El edificio parte en construcción, parte en ruina, le interesó más que las ruinas mayas del mismo nombre. Smithson hizo una serie de fotografías del hotel, y en 1972 dio una charla en la Universidad de Utah donde resaltaba las cualidades entrópicas del edificio.
La exposición Incidentes de viaje espejo en Yucatán y otros lugares de la serie Acercamientos al acervo del Museo Tamayo se encuentra libremente inspirada en los viajes de Stephens, Catherwood y Smithson, y existe en el espacio creado por los reflejos, resonancias y rupturas que se producen entre los trabajos de éstos, y la genealogía posterior de viajeros, artistas, fotógrafos y arqueólogos que han seguido sus huellas. La exposición también se complementa con una serie de trabajos que sin hacer referencia directa a Catherwood, Stephens o Smithson, también construyen y cuestionan el paisaje de ruinas antiguas y modernas a través del turismo, la arqueología, la antropología, o la historia, para así proponer una nueva arqueología del presente.