Desde sus inicios creativos como artista, Gustavo Romano ha experimentado con las posibilidades conceptuales y los procesos de producción de los nuevos medios como el video, la animación y el Internet.

Mi deseo es tu deseo (1996) es una de las primeras obras en las que Romano trabajó con los procesos de la red; expuesta por primera vez en México en 1997, esta pieza habla sobre la falsa identidad en el entramado de los networks. En Hyperbody (2000-2004), el artista recurre a la compleja temática de la corporeidad digital. Mediante el desmembramiento de los órganos de un hombre y una mujer, dispersos en los dominios de la red a partir de una imagen obtenida de la sonda espacial Pioneer 10, como referente interespacial de la humanidad, el artista vincula cada parte de esos órganos humanos en el espacio digital de la red.

Romano devela su etapa de “clasificador” en Cyberzoo (2003-2005), al construir un zoológico de la era digital donde se resguardan peligrosas especies en peligro de extinción. En este zoológico de la info-esfera, famosos virus informáticos, considerados como vida artificial, son resguardados y estudiados. En The World 1:1 (2003), se vincula la experiencia de la navegación de Internet con latitudes y percepciones “reales” de la urbanidad. A su vez, el proyecto IP Poetry (2006) se basa en la generación de poesía que existe a partir de la búsqueda, en tiempo real, de material textual en la Web. En esta pieza, robots que se encuentran conectados a Internet convierten los textos hallados por ellos en sonidos e imágenes pregrabados, los cuales emite una boca humana que recita los fonemas. Las diferentes instrucciones de búsqueda conforman la estructura y el sentido de cada poema.

Para Romano, la autorreflexión que realiza del arte en red se da de manera lúdica y espontánea, contraponiéndola con la realidad concreta, lo cual representa una constante en el sentido de producción en Internet.